Al margen de desagravios públicos –convenencieros, retóricos y demagogos-, lo sucedido el 24 de mayo en el campus de Ciudad Universitaria es irrefutable: el ingreso de elementos de la policía municipal de Culiacán violó la autonomía de la UAS, es decir, el Alcalde de Culiacán, Jesús Valdez Palazuelos, trasgredió la ley que rige a la máxima casa de estudios sinaloense y que se basa en la Fracción VII del Artículo 3 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

La persecución que policías municipales de Culiacán realizaron para detener a alumnos dentro del campus universitario, so pretexto de que mediante una llamada al 911 los alertó de que había disturbios en los festejos del Día del Estudiante, no sólo fue reprobada por el Rector Juan Eulogio Guerra Liera sino que la calificó como una clara provocación, una irresponsabilidad de las instancias municipales y una falta de respeto a la autonomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa.

En ese sentido, el Rector Guerra Liera precisó que de manera innecesaria se puso en riesgo a la comunidad universitaria violentando la normatividad que rige a la máxima casa de estudios sinaloense, porque el operativo de la policía municipal pudo derivar en un enfrentamiento con estudiantes de consecuencias impredecibles.

En su momento, como diputado local, Jesús Valdez –por cierto egresado de la UAS- votó en contra de la petición de las autoridades universitarias que demandaban un mejor subsidio; ahora, como alcalde, trasgredió con la policía el  Artículo 1 de la Ley Orgánica que establece que “la Universidad Autónoma de Sinaloa es una institución de educación pública descentralizada del Estado que cuenta con personalidad jurídica y patrimonio propio…”

Violentar el régimen de autonomía de la máxima casa de estudios sinaloense, no es cosa menor.

El hecho es más grave, toda vez que la violación a la autonomía de la UAS fue llevada a cabo por elementos de seguridad pública del ayuntamiento de Culiacán que encabeza el Alcalde Jesús Valdez, es decir por servidores públicos que son los primeros que deben respetar y hacer respetar la ley.

La autonomía de la UAS está vigente desde diciembre de 1965, fecha en que recobra ese régimen que había sido abrogado en 1937.

La conclusión del Rector Juan Eulogio Guerra Liera sobre este hecho fue contundente: “en ningún momento las autoridades de la Universidad Autónoma de Sinaloa autorizaron el ingreso de elementos de la policía municipal a las instalaciones de Ciudad Universitaria durante los festejos del Día del Estudiante, nunca se coordinaron con la institución y fue decisión que ellos asumieron violentando la autonomía de la Casa Rosalina”.